SUCESOS EN CASTELLAR: Se convoca una manifestación pidiendo "PAZ Y CONVIVENCIA" y se termina agrediendo a personas. ¿Qué hay detrás de ello?. Si de verdad queremos contribuir a la PAZ Y CONVIVENCIA entre las personas, iguales o diferentes, pensemos, reflexionemos. Quizás nos pueden ayudar los dos vídeos que aparecen a continuación y el comunicado de la UNIÓN ROMANÍ
Racismo en Castellar
COMUNICADO DE LA UNION ROMANI
Dirección Postal/Postal Address:Apartado de Correos 202E-08080 BARCELONA (Spain)Tel. +34 934127745Fax. +34 934127040
E-mail: u-romani@pangea.org URL: http://www.unionromani.org/
Las organizaciones gitanas que durante los últimos días se han preocupado por conocer la situación de los gitanos vecinos de Castellar que se vieron obligados a abandonar sus hogares ante el temor de ser violentamente agredidos por otros vecinos no gitanos de la localidad quieren manifestar lo siguiente.
Primero. Debemos hacer un llamamiento a todos, gitanos, "gadches" (no gitanos), autoridades, periodistas y ciudadanos en general para analizar los hechos con la suficiente cordura y objetividad con el fin de evitar que la situación se enquiste haciendo cada vez más difícil la vuelta a la normalidad democrática. Normalidad que se debe manifestar en el mutuo respeto, que siempre ha regido en la inmensa mayoría de los pueblos de Andalucía donde vivimos los gitanos, incluidos nuestros hermanos de Castellar.
Segundo. Aunque parezca innecesario debemos insistir en que no se debe caer en acusaciones absurdas, inapropiadas y falsas, como decir que los todos los "gadches" de Castellar son unos racistas, o que todos los gitanos somos unos delincuentes. Lo qué si parece evidente es que en Castellar se han dado comportamientos racistas por parte de algunos ciudadanos del lugar y que algunos gitanos han intervenido en actos de enfrentamiento callejero entre jóvenes que a todas luces debemos condenar.
Tercero. Siendo tanto la violencia racista como los comportamientos incívicos o delictivos lacras que cualquier sociedad democrática debe erradicar, nosotros, gitanos y gitanas del siglo XXI, decimos que estos hechos deben ser denunciados ante los jueces para que sea la justicia, nunca los particulares, quien depure responsabilidades, castigue ejemplarmente a quienes sean culpables y defienda con firmeza a las víctimas de cualquier agresión.
Cuarto. Queremos y debemos manifestar desde aquí nuestro apoyo a las autoridades locales y provinciales de Castellar y de Jaén. El diálogo con ellos, no siempre fácil por nuestra parte, ha sido posible desde el mutuo respeto y el deseo por todos compartidos de poner fin cuanto antes a la situación que ha vivido y se sigue viviendo en Castellar. Ayuntamiento, Subdelegación del Gobierno y Delegación del Gobierno de Andalucía han escuchado nuestras razones y juntos hemos llegado a acuerdos puntuales que pueden ser la solución definitiva al conflicto planteado.
Quinto, A nosotros, gitanos y gitanas preocupados por la situación de evidente pobreza y marginación en que viven los gitanos de Castellar, nos interesar resaltar que los ejes de nuestra intervención ante las autoridades jienenses, han sido los siguientes:
a) Se debe garantizar la protección y la seguridad de las familias gitanas de Castellar. Estas personas están atemorizadas. No pueden ejercer con libertad sus derechos fundamentales como ciudadanos por temor a ser agredidos. Los niños, especialísimamente, deben ser protegidos para que puedan ir al colegio sin miedo.
b) La situación de extrema pobreza de los gitanos de Castellar exige una atención urgente por parte de las autoridades. Garantizarles el derecho a la subsistencia y establecer un plan de ayudas a las familias, personalizando en cada una de ellas el nivel de sus necesidades, es una acción que se debe realizar sin mayor demora.
c) El Ayuntamiento por su parte y la Junta de Andalucía por la suya deben incluir a estas familias en los planes de promoción social y desarrollo personal que tienen establecidos. Sólo una acción decidida en esta materia puede ser la garantía de que en un futuro próximo desparezcan las diferencias que todavía hoy existen en nuestra tierra donde unos lo tienen todo mientras otros carecen de lo más indispensable para vivir.
d) Al mismo tiempo hemos manifestado nuestro deseo de que se constituya una comisión que siga puntualmente los acuerdos tomados y alerte, tanto a las autoridades, como a las asociaciones gitanas presentes en este diálogo, cuando por cualquiera de las partes se incumplan los compromisos adoptados.
Sexto. Queremos manifestar que por parte de las autoridades que junto a nosotros han participado en este diálogo, hemos encontrado la mejor disposición para dar respuesta a nuestras peticiones. Así lo queremos hacer constar porque es de justicia.
Séptimo. Finalmente queremos manifestar que habiéndose presentado varias denuncias ante la Guardia Civil, que tendrán su continuación lógica ante los órganos judiciales pertinentes, nosotros, haciendo valer nuestros derechos constitucionales, nos personaremos en la causa que oportunamente abrirá el Juzgado, para que, como acusación particular, se haga justicia y sean castigados quienes hayan violado el derecho de cualquier ciudadano a vivir en paz con la garantía de que su persona y sus bienes no sean violentados o destruidos.
Primero. Debemos hacer un llamamiento a todos, gitanos, "gadches" (no gitanos), autoridades, periodistas y ciudadanos en general para analizar los hechos con la suficiente cordura y objetividad con el fin de evitar que la situación se enquiste haciendo cada vez más difícil la vuelta a la normalidad democrática. Normalidad que se debe manifestar en el mutuo respeto, que siempre ha regido en la inmensa mayoría de los pueblos de Andalucía donde vivimos los gitanos, incluidos nuestros hermanos de Castellar.
Segundo. Aunque parezca innecesario debemos insistir en que no se debe caer en acusaciones absurdas, inapropiadas y falsas, como decir que los todos los "gadches" de Castellar son unos racistas, o que todos los gitanos somos unos delincuentes. Lo qué si parece evidente es que en Castellar se han dado comportamientos racistas por parte de algunos ciudadanos del lugar y que algunos gitanos han intervenido en actos de enfrentamiento callejero entre jóvenes que a todas luces debemos condenar.
Tercero. Siendo tanto la violencia racista como los comportamientos incívicos o delictivos lacras que cualquier sociedad democrática debe erradicar, nosotros, gitanos y gitanas del siglo XXI, decimos que estos hechos deben ser denunciados ante los jueces para que sea la justicia, nunca los particulares, quien depure responsabilidades, castigue ejemplarmente a quienes sean culpables y defienda con firmeza a las víctimas de cualquier agresión.
Cuarto. Queremos y debemos manifestar desde aquí nuestro apoyo a las autoridades locales y provinciales de Castellar y de Jaén. El diálogo con ellos, no siempre fácil por nuestra parte, ha sido posible desde el mutuo respeto y el deseo por todos compartidos de poner fin cuanto antes a la situación que ha vivido y se sigue viviendo en Castellar. Ayuntamiento, Subdelegación del Gobierno y Delegación del Gobierno de Andalucía han escuchado nuestras razones y juntos hemos llegado a acuerdos puntuales que pueden ser la solución definitiva al conflicto planteado.
Quinto, A nosotros, gitanos y gitanas preocupados por la situación de evidente pobreza y marginación en que viven los gitanos de Castellar, nos interesar resaltar que los ejes de nuestra intervención ante las autoridades jienenses, han sido los siguientes:
a) Se debe garantizar la protección y la seguridad de las familias gitanas de Castellar. Estas personas están atemorizadas. No pueden ejercer con libertad sus derechos fundamentales como ciudadanos por temor a ser agredidos. Los niños, especialísimamente, deben ser protegidos para que puedan ir al colegio sin miedo.
b) La situación de extrema pobreza de los gitanos de Castellar exige una atención urgente por parte de las autoridades. Garantizarles el derecho a la subsistencia y establecer un plan de ayudas a las familias, personalizando en cada una de ellas el nivel de sus necesidades, es una acción que se debe realizar sin mayor demora.
c) El Ayuntamiento por su parte y la Junta de Andalucía por la suya deben incluir a estas familias en los planes de promoción social y desarrollo personal que tienen establecidos. Sólo una acción decidida en esta materia puede ser la garantía de que en un futuro próximo desparezcan las diferencias que todavía hoy existen en nuestra tierra donde unos lo tienen todo mientras otros carecen de lo más indispensable para vivir.
d) Al mismo tiempo hemos manifestado nuestro deseo de que se constituya una comisión que siga puntualmente los acuerdos tomados y alerte, tanto a las autoridades, como a las asociaciones gitanas presentes en este diálogo, cuando por cualquiera de las partes se incumplan los compromisos adoptados.
Sexto. Queremos manifestar que por parte de las autoridades que junto a nosotros han participado en este diálogo, hemos encontrado la mejor disposición para dar respuesta a nuestras peticiones. Así lo queremos hacer constar porque es de justicia.
Séptimo. Finalmente queremos manifestar que habiéndose presentado varias denuncias ante la Guardia Civil, que tendrán su continuación lógica ante los órganos judiciales pertinentes, nosotros, haciendo valer nuestros derechos constitucionales, nos personaremos en la causa que oportunamente abrirá el Juzgado, para que, como acusación particular, se haga justicia y sean castigados quienes hayan violado el derecho de cualquier ciudadano a vivir en paz con la garantía de que su persona y sus bienes no sean violentados o destruidos.
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